Tras la declaración la semana pasada del delegado de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid, Borja Carabante, en la que anunciaba para el 1 de enero de 2022 la supresión de todas las terrazas Covid que ocupan bandas de aparcamiento, se han sucedido múltiples reacciones por parte de grupos políticos y sociales que abogan no sólo por esta medida sino por la reversión absoluta de todas las licencias Covid cuando expire el plazo a finales de año. Las asociaciones vecinales de algunos distritos son las más combativas y exigen al alcalde la vuelta a la normalidad. ¿El motivo? la falta de espacio, el ruido y las borracheras, que conducen a situaciones peligrosas y perniciosas.
La vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, ha salido al paso de la decisión unilateral que ha planteado Movilidad para defender a los hosteleros recordando que se trata de una herramienta para mantener muchos puestos de trabajo y recuperar las importantes pérdidas ocasionadas por la pandemia, y abogó de cara al futuro por el "uso inteligente del espacio público", recordando, en un mensaje claro hacia los detractores de estas terrazas, que es su equipo quién tiene dichas competencias en el Ayuntamiento. "Tenemos la oportunidad de ofrecer una nueva cara para Madrid, espacios más alegres y habitables como ya tienen ciudades como París o Nueva York, muchas de estas terrazas han llegado para quedarse", afirmó recientemente en un café que mantuvo con nuestra asociación.
Por su parte la portavoz de Más Madrid, Rita Maestre, ha manifestado que "los espacios ni son de las terrazas ni son de los coches", y que más allá del mantenimiento de las terrazas se pueden aprovechar estos espacios para "ampliar aceras, poner plantas, poner bancos para sentarse o hacer caminos seguros al cole".
Almeida, juez
Ante la batalla que se está planteando, el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, que en un principio se mostró partidario de la decisión de revertir la situación en pro de recuperar las plazas de aparcamiento y el descanso de los vecinos, manifestó hoy que se sentará a negociar con todos los grupos políticos y agentes sociales para reformar en el futuro la ordenanza municipal de terrazas de Madrid con el fin de garantizar la convivencia vecinal y ofrecer un marco de estabilidad que beneficie también a la hostelería. (Sigue leyendo)